Los colores juegan un papel muy importante en el marketing y la publicidad, son capaces de influir directamente en nuestras emociones. Ciertas tonalidades nos transmiten alegría, relajación, vitalidad…, y otras en cambio, pueden irritarnos. Este campo de estudio se conoce como psicología del color, y se encarga de analizar cómo percibimos y nos comportamos al ver distintos colores y qué emociones nos generan.
Por esta razón, la psicología del color es nuestra mejor aliada al crear una imagen corporativa: conecta a las personas con las marcas y hace que desarrollen su propia personalidad. Al diseñar logotipos, muchas empresas tienen en cuenta los colores que van a emplear, pues así enviarán un mensaje u otro al público.
El significado de los colores en la psicología del color
El color y sus tonalidades, su nivel de saturación y luminosidad, nos evocan diferentes sensaciones, siempre dependiendo también de la subjetividad de cada persona. Generalmente, los tonos más oscuros transmiten sentimientos más tristes y pesimistas que los que están mejor iluminados.
Te explicamos con detalle las emociones que evoca cada color, así como sus características principales:
Rojo
El color rojo llama la atención, así que es ideal para estimular a realizar acciones. En publicidad, se usa a menudo para evocar sensaciones atrevidas o para indicar peligro.
Se asocia con la pasión, el atrevimiento, la fuerza, el calor y la exuberancia. También da sensación de desafío, impacto y tensión.
Amarillo
Evoca sentimientos alegres y agradables; puede utilizarse para promocionar productos infantiles o relacionados con el ocio. Suele percibirse como un color despreocupado, por lo que no se recomienda para vender artículos caros.
Transmite felicidad, amistad, autoestima y extroversión. También da sensación de advertencia, fragilidad, ansiedad y miedo.
Naranja
Este color da sensación de calor y suele ser utilizado para llamar la atención y promocionar productos alimenticios o juguetes.
La psicología del color naranja está relacionada con la energía, diversión, seguridad, calidez y confort. Por otro lado, está asociada con la frustración, frivolidad e inmadurez.
Verde
El verde tiene un gran poder curativo, se utiliza para indicar equilibrio o promocionar productos ecológicos.
Sugiere paz, salud, relajación, armonía, aburrimiento y enervación.
Azul
Produce un efecto calmante y emite seguridad. En publicidad, se utiliza para demostrar confianza a los clientes.
Significa calma, reflexión, inteligencia, seguridad y confianza; pero también distanciamiento y frialdad.
Morado
Suele identificarse con la feminidad, y al utilizarlo se busca denotar elegancia y sensibilidad. También suele relacionarse con la rareza y excentridad.
Representa la sabiduría, la imaginación, la locura, el misterio y la magia.
Negro
En la psicología del color, el negro tiene una connotación negativa. De la misma forma, es un color elegante y prestigioso, ideal para marcas de lujo.
Transmite sofisticación, protección, elegancia y glamour; además de opresión y amenaza.
Blanco
El blanco se emplea sobre todo para comunicar sencillez, y puede generar emociones positivas en el público.
Se asocia con salud, higiene, bienestar, pureza y claridad. En lo negativo, transmite frialdad y antipatía.
Como resumen, todo color forma parte del lenguaje no verbal, siempre existe una pequeña influencia con los mensajes y valores de una marca. Por eso, deben seleccionarse cuidadosamente para ir alineados con lo que se quiere comunicar y transmitir.
¡Síguenos en Facebook e Intagram para más contenido interesante!